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Jueves 25 de noviembre de 2010

Fuerza de Tarea BASEREC culminó su labor de apoyo a la recuperación de la Base Naval de Talcahuano

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El Comandante del Departamento de Obras y Construcciones de la Segunda Zona Naval, Capitán de Fragata Jaime León hizo entrega de la Insignia de Mando al Contraalmirante Gabriel Barros.

Talcahuano. Departamento de Relaciones Públicas de la Segunda Zona Naval. La Fuerza de Tarea Baserec, luego de ocho meses y 25 días, culminó las principales actividades de trabajo en apoyo a la recuperación de la Base Naval de Talcahuano, las que resultaron afectadas por la emergencia de febrero pasado.

En el helipuerto de la Base Naval se desarrolló la ceremonia donde fue arriada la Insignia de Mando del Contraalmirante Gabriel Barros Orrego, quien se desempeñó como Comandante de esta Fuerza de Tarea Naval.

Durante estos meses, el personal que integró la Fuerza de Tarea BASEREC cumplió importantes labores para materializar los trabajos que permitieron superar la primera fase de la emergencia, la que fue controlada luego de un mes y medio. En ese período se realizó limpieza en oficinas y casas, se retiraron escombros orgánicos, se sanitizaron las dependencias, se restablecieron los servicios de luz, agua, gas, alcantarillado y otros, trabajos fundamentales para colocar en funcionamiento la Base Naval.

 

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En el Helipuerto de la Base Naval de Talcahuano se realizó una ceremonia militar interna, con la cual se puso término a las actividades de la Fuerza de Tarea BASEREC.

Luego vino el proceso de definir qué hacer con las reparticiones dañadas y dónde instalar las nuevas dependencias. Para ello se elaboró un programa con 186 tareas, teniendo como prioridades las áreas de habitabilidad para el personal, la cocina general y los comedores. Posteriormente, se habilitaron oficinas administrativas para la Comandancia de la Base Naval Talcahuano, el Arsenal Naval (T), el Centro de Abastecimiento (T), el Destacamento IM Nº3 "Aldea" y la Guarnición IM Orden y Seguridad, entre otras.

El otro frente de trabajo estuvo dado por las demoliciones que ejecutaron empresas especializadas, las que eliminaron las casas de la avenida Jorge Montt y otras de las poblaciones Señoret, Young y Guardián Brito, más las reparticiones navales que estaban frente al Molo 500, las que resultaron bastante dañadas. Esto dará paso a la reconstrucción de la Base Naval de Talcahuano, la que cambiará su fisonomía para cumplir las necesidades del siglo XXI.

 

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En su discurso el Contraalmirante Barros se refirió a las innumerables tareas que se realizaron durante estos meses, para ir recuperando las capacidades operativas de la Base Naval de Talcahuano.

Con orgullo el Contraalmirante Barros detalló una larga lista de múltiples tareas cumplidas inicialmente por el Batallón de Apoyo Comunitario (BAC) y por la Compañía de Apoyo a la Reconstrucción (CAR), ambas conformadas por Oficiales y Gente de Mar de diversas reparticiones, que con gran entrega, entusiasmo y profesionalismo cumplieron la planificación por sobre las expectativas, felicitando al personal que participó en ellas.

En su discurso el Contraalmirante Barros señaló "del listado de tareas definidas, tenemos 114 terminadas y 72 en ejecución, las que terminarán este mes o el próximo, quedando muy pocas para ser terminadas en enero y febrero de 2011. Estando las tareas definidas y financiadas y los contratos en ejecución, el Departamento de Obras y Construcciones de la Segunda Zona Naval deberá continuar con su accionar hasta terminar las obras, ahora dependiendo de la Comandancia de la Base Naval Talcahuano".

 

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Momentos en que fue arriada la Insignia de Mando del Contraalmirante Gabriel Barros Orrego.

A lo que agregó, "ya se ha comenzado con el desarrollo de los proyectos de recuperación de las capacidades definitivas, labor que demandará una serie de sacrificios para lograr materializar una Base Naval moderna y funcional, que pueda cumplir con los requerimientos de los organismos operativos, razón de ser de todas las dependencias terrestres y por ende de esta Base Naval. Para esto, se creó el grupo Apostadero, dependiente de la Dirección de Recuperación de la Armada, el cual debe integrar todas las reparaciones y reconstrucciones definitivas, en un plazo de dos a tres años".

El entonces Comandante en Jefe de la Segunda Zona Naval Contraalmirante Roberto Macchiavello Marcelí, quien presidió la ceremonia, destacó y agradeció públicamente el trabajo desarrollado por cada uno de los marinos que integraron esta Fuerza de Tarea bajo las órdenes del Contraalmirante Barros "desde ocurrida la catástrofe, ustedes han estado presentes para superar esta emergencia y con su trabajo la Base Naval de Talcahuano ha recuperado paulatinamente su operatividad".