Conmemoración del día de la Fuerza Naval ecuatoriana en la Base Naval de Talcahuano

 

Talcahuano. Departamento de Relaciones Públicas de la Segunda Zona Naval. El personal de la Armada de Ecuador que se encuentra en Talcahuano, como parte de la misión en donde participa en el proyecto de modernización de submarinos, se reunieron en la plaza Los Héroes de la Base Naval de Talcahuano, acompañados por una delegación de la Armada de Chile, para conmemorar el septuagésimo aniversario del combate de Jambelí y el día de la Armada de Ecuador.

El acto conmemorativo, presidido por el Comandante en Jefe de la Segunda Zona Naval, Contraalmirante Matías Purcell, se inició con la entonación de los himnos nacionales y el izamiento del pabellón de ambos países, marco de solemnidad propicio para que el Capitán de Navío del Estado Mayor Conjunto, Diego Núñez, jefe de la misión de modernización de submarinos de la Armada de Ecuador en Chile, diera lectura a un emotivo discurso en el que recordó los acontecimientos que tuvieron lugar el 25 de julio de 1941, en el que participó el Cañonero "Calderón", al mando del Comandante Rafael Morán Valverde, luego de escoltar un convoy de naves en el golfo de Guayaquil. También destacó la trayectoria profesional del "Ilustre Héroe de la Armada de Ecuador", quien ingresó a la Escuela Naval en 1924 - a los 20 años de edad - prestando sus servicios en diversos buques. "A fines de 1937, como Teniente de Fragata vino a Talcahuano a terminar su educación navegando en el destructor Riquelme".

 

En sus palabras, el Comandante Núñez manifestó, "la Armada tiene pasado, presente y futuro al servicio de la Patria. Pasado, que es historia y escuela de la vida. Presente, que es trabajo con dedicación y sacrificio. Y un futuro, camino ancho con espíritu de superación constante. Hoy tributamos a los sabios maestros del pasado, chilenos y ecuatorianos, el culto de toda nuestra pasión y el reconocimiento sin límite de nuestro agradecimiento. Los invoco a realizar y mantener un compromiso de honor ante nuestras queridas patrias, nuestras instituciones y ante nosotros mismos, para que cada día sea de entrega total, aportando con vocación para ser de nuestra profesión un instrumento eficaz de ejemplo y entrega. Removemos nuestra fe y mística para que cuando actuemos en el cumplimiento de nuestras tareas y funciones, lo hagamos con firmeza, decisión y voluntad de lucha".

El jefe de la misión de modernización de submarinos de la Armada de Ecuador en Chile finalizó sus palabras agradeciendo la hospitalidad que él y el personal bajo su mando ha recibido durante su estadía en la Base Naval de Talcahuano, "al permitir la realización de este solemne acto, gesto que lo tomamos como una deferencia especial, que fortalece la hermandad, caballerosidad y compañerismo que a lo largo de la historia ha sido tradición entre las dos Armadas".