Viernes 28 de marzo de 2008
Ceremonia de Ordenación Sacerdotal en Puerto Williams
Puerto Williams.- Departamento de Relaciones Públicas del Distrito Naval Beagle.- En una emotiva ceremonia colmada de tradiciones eclesiásticas, que se llevó a efecto este mediodía en la Sala de Uso Múltiple del Liceo "Donald Mc Intyre Griffiths " de Puerto Williams, se ordenó como sacerdote el Diácono de la Capilla Naval "Nuestra Señora del Carmen", Juan Eliécer Correa Ruiz.
Esta inédita actividad realizada en la ciudad de Puerto Williams fue presidida por el Gobernador de la Provincia Antártica de Chile, Claudio Flores Flores; el Alcalde de la Comuna de Cabo de Hornos, José Soto Passek; el Comandante en Jefe de la Tercera Zona Naval, Contraalmirante Felipe Ojeda Simons; el Comandante del Distrito Naval Beagle, Capitán de Fragata Francisco Javier Abrego Arce; el Cónsul de Chile en Ushuaia, Raúl Sanhueza Carvajal; además de representantes de las Fuerzas Armadas y de Orden chilenas y argentinas, del ámbito político, de los servicios públicos y la comunidad de la ciudad.
Por la Iglesia Católica presidió la ceremonia el Obispo de Arica, Monseñor Héctor Eduardo Vargas Bastidas acompañado por el Obispo de Punta Arenas, Monseñor Bernardo Bastres Florence junto a sacerdotes de Bolivia, Perú, Argentina, Europa y Chile.
El sacerdocio ministerial instituido por Jesucristo, tiene como tarea servir a la comunidad, anunciar el Evangelio y ayudar a la santificación del pueblo de Dios presidiendo la Sagrada Liturgia. Tomado de entre los hombres, el sacerdote se pone al servicio de Dios y de la comunidad configurándose a Cristo día a día.
Rito de Ordenación
En el Rito de Ordenación el Padre Amador Soto Miranda, Superior de la Sociedad Misionera del Buen Pastor presentó a Monseñor Vargas, en nombre de la comunidad, al hermano que ha sido elegido para el Ministerio Sacerdotal. Luego el Obispo hace algunas preguntas al candidato al presbiterado, quien públicamente dice sí, haciendo su promesa de fidelidad a su Ministerio.
Le sigue la promesa de obediencia mediante la cual el candidato se acerca al Obispo y arrodillado ante él, pone sus manos juntas entre las manos de Monseñor. Así, el ordenado como signo de humilde súplica se postra en el suelo, para significar el abandono a la voluntad de Dios y a sus designios frente a la misión que él le confía.
Una vez de pie se procede a una tradición que data de los comienzos de la Iglesia, con la cual los Apóstoles ordenaban a los primeros presbíteros con la imposición de las manos, así el Obispo impone sus manos sobre el Diacono Juan invocando la presencia del Espíritu Santo que consagra y transforma la vida; lo mismo hacen los demás sacerdotes presentes.
Imposición de la Estola y la Casulla
Uno de los momentos más emotivos del ritual de ordenación es cuando los sacerdotes revisten al ordenado con la estola y la casulla, entregadas por amigos del nuevo sacerdote en representación de su familia. El Obispo unge las manos al Nuevo Presbítero con el Santo Crisma, signo de indisolubilidad y el carácter que imprime el sacerdocio ministerial.
Previo al inicio de la Liturgia de la Eucaristía el Nuevo Presbítero recibe la Patena y el Cáliz y es saludado por el Obispo, quien lo presenta a la Asamblea y recibe la felicitación de todos los sacerdotes como un signo de acogida dentro de la familia de los Presbíteros.
Finalizada la Santa Misa las autoridades y los asistentes a la ceremonia de ordenación saludaron al Nuevo Presbítero Juan Eliécer Correa Ruiz.