Domingo 16 de enero de 2011
Desafíos sobre y bajo el mar
Buque Madre de Submarinos ha ejercido las funciones propias de su rol y también ha participado en importantes operaciones de apoyo a la comunidad.
El concepto de "Buque Madre" de Submarinos que acompaña al BMS "Almirante Merino" desde su incorporación a la Armada en 1997 no puede estar mejor aplicado, teniendo en cuenta que cumple justamente los roles considerados como "maternales": acoge a bordo a las dotaciones dándoles refugio, descanso y alimento cuando lo necesitan, además de proveer a los submarinos de todo lo que requieren para cumplir su misión con plena efectividad.
Durante el año pasado, el buque ejerció no solamente su rol principal, sino que además cumplió un importante papel en la Operación Loreto, en apoyo al rescate de víctimas y restos materiales del avión C-212 de la FACH siniestrado en Juan Fernández, y también tomó parte en el programa de mediciones batimétricas destinadas a definir con exactitud la plataforma continental extendida de Chile en la zona de Isla de Pascua, tarea que continuará durante el presente año.
El buque inició sus funciones correspondientes al año 2012 apoyando una gira de orquestas infantiles y juveniles en la jurisdicción de la Quinta Zona Naval que se extendió hasta Puerto Chacabuco. El jueves 12 de enero se realizó en Talcahuano la ceremonia en que el Comandante saliente, Capitán de Fragata David Curotto, entregó el mando del buque al Capitán de Fragata Patricio Espinoza, quien zarpó el martes 17 rumbo al sur para cumplir a su vez con su primera comisión del año, consistente en entregar apoyo logístico para el desarrollo de la Regata Chiloé. Según expresó el Comandante Espinoza, en todas estas misiones se han aprovechado las capacidades propias de la unidad como buque madre de submarinos, relativas a habitabilidad y entrega de suministros, además de su plena disponibilidad para participar en operaciones de búsqueda y salvamento.
El Subteniente Matías Vargas está cumpliendo a bordo su segundo año, luego de un 2011 marcado en gran medida por la participación en la Operación Loreto. Recordó que "estuvimos cerca de un mes en Juan Fernández y al comienzo fueron dos semanas muy desgastantes, con jornadas extensas y de mucho trabajo tomando parte en los sondajes. Posteriormente asumimos un rol más orientado al apoyo logístico, donde pude aplicar de mejor manera mis funciones y capacidades".
El Sargento 1º Eduardo Chávez ha desarrollado su carrera principalmente en submarinos y en el plantel de la especialidad. Antes de ser destinado al BMS "Almirante Merino", donde cumple su segundo año a bordo, había estado también en el antiguo DDG "Almirante Williams". A su juicio, "existen diferencias en la cultura naval de las dotaciones de submarinos y de superficie, pero yo he formado parte de ambas y considero que cada una sabe integrarse y aprender de la otra. Es una forma de ver la otra cara de la Armada. Para mí, la destinación en este buque ha sido también una oportunidad de volver a ser alumno, después de años cumpliendo el rol de instructor".
La principal experiencia embarcada que tuvo el Cabo 1º Cristián Riquelme antes de su destinación en el BMS "Almirante Merino" fue en la FF "Almirante Williams", unidad en la que integró su primera dotación, desde su incorporación a la Armada en el Reino Unido. Se unió al BMS "Almirante Merino" en el 2011 y al poco tiempo de terminar con un periodo de mantenimiento el buque fue enviado a la Operación Loreto. Recordó que "en esos primeros días todos trabajamos muy intensamente, porque aún había esperanza de encontrar sobrevivientes a la caída del avión que pudieran estar refugiados en los roqueríos de la costa, pero se buscó infructuosamente. Todos trabajamos muy motivados, aunque llevábamos bastante tiempo alejados de nuestras familias, porque sabíamos que era por una buena causa, y el buque también respondió muy bien a pesar de que no era exactamente su rol".
Primeras mujeres a bordo
Cuando a futuro se revise el historial de este buque, se podrá ver entre sus hitos a quienes conformaron su primera dotación femenina, las Subtenientes Macarena Estay y Marianela Villar, quienes se incorporaron a bordo a comienzos de enero. "Como integrantes de esta primera dotación sentimos una responsabilidad muy grande porque sabemos que estamos abriendo el camino a las próximas generaciones, que se van a nutrir de nuestra experiencia", señaló la Subteniente Estay
Agregó que "como pertenezco a la especialidad de Abastecimiento, tenía la opción de estar destinada este año en tierra, pero preferí un destino embarcada porque en los buques hay más movimiento. Además, considero que ahora estoy en la edad de aprender. En mi Departamento soy la única mujer, un desafío bastante atractivo".