Óleo del Comandante Arturo Prat regresa al Museo Monitor "Huáscar"

Martes 4 de mayo de 2021

La pieza de arte creada por Ramón Ponce Arias en 1919 fue restaurada en el Museo Marítimo Nacional en Valparaíso.

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A primera hora del lunes 3 de mayo, y bajo una íntegra custodia, pudo retornar al Museo Flotante Monitor “Huáscar” una de sus pinturas destacadas, la que corresponde al retrato del Comandante Arturo Prat Chacón, plasmado por el artista Ramón Ponce Arias en 1919 y que fue obsequiada a la Institución por el Club de Concepción el año 1944.

Ya en Talcahuano, el Jefe del Departamento de Operaciones de la Comandancia en Jefe de la Segunda Zona Naval y Comandante del RH “Huáscar”, Capitán de Fragata Alejandro Rosa, junto a su dotación, hicieron la correspondiente recepción, desembalaje y montaje de la obra en la Cámara del Comandante Grau.

Este lienzo, según señala la especialista y Jefa del Departamento de Conservación del Museo Marítimo Nacional, Doris Valdeavellano, fue restaurado como parte de las actividades de apoyo a las diferentes Unidades y Reparticiones de la Armada.

“Debió ser sometido a un exhaustivo y complejo proceso de restauración mayor, pues el grado de deterioro activo, producto del devenir en el tiempo, ya había hecho sus estragos en la obra, haciendo peligrar su preservación y dificultando la apreciación artística por parte de los visitantes”, comentó Valdeavellano.

Específicamente se le realizaron tratamientos complejos y extensos para lograr recuperar la unidad estético-matérica perdida, tanto en la pintura como en el marco, en donde algunos de los procesos de intervención de mayor relevancia consistieron en volver a fijar la pintura craquelada suelta y eliminar las grandes zonas de repintes, tanto en el fondo, como en la figura, las que fueron analizadas con luz ultravioleta.

Posterior a esto se procedió con la reintegración cromática de toda la capa pictórica, teniendo en cuenta que en los tratamientos efectuados primaron los conceptos y criterios de mínima intervención, conjugando mejorar el estado de conservación de este patrimonio pictórico, versus su apreciación estética, realizando siempre lo más inocuo y asertivo para este legado.