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Viernes 30 de noviembre de 2012

Cambio de Mando de la Comandancia en Jefe de la Segunda Zona Naval

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Comandante en Jefe de la Segunda Zona Naval, Contraalmirante Osvaldo Schwarzenberg Ashton; Jefe del Estado Mayor General de la Armada, Vicealmirante Francisco Guzmán Vial, interventor, y Contraalmirante Matías Purcell Echeverría.

Talcahuano. Departamento de Relaciones Públicas de la Segunda Zona Naval. Las salvas de cañón que resonaron por los aires de la bahía de Concepción la mañana de este 30 de noviembre marcaron el final de la gestión del Contraalmirante Matías Purcell Echeverría al frente de la Segunda Zona Naval y el inicio del mandato del Contraalmirante Osvaldo Schwarzenberg Ashton, al ser arriada e izada las respectivas Insignias de Mando a bordo del Monitor "Huáscar", buque insignia de esta Zona Naval.

Ante la presencia de las máximas autoridades civiles y militares de la Región del Bío Bío, encabezadas por el Intendente Víctor Lobos, representantes de diversas organizaciones vecinales de la comuna de Talcahuano e invitados especiales, se desarrolló la ceremonia de cambio de mando de la Comandancia en Jefe de la Segunda Zona Naval, Comandante General de la Guarnición Naval de Talcahuano y Juez Naval, la que fue presidida por el Jefe del Estado Mayor General de la Armada, Vicealmirante Francisco Guzmán Vial, quien además fue el interventor.

El Contraalmirante Purcell tras casi 40 años de servicio como Oficial de Marina deja las filas de la Armada de Chile, para pasar a retiro de la Institución, acción que definió con las siguientes palabras: "ha llegado el momento de quedarme en el muelle y largarle las espías a mi querida Marina que sigue navegando en servicio de la Patria".

 

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El Jefe del Estado Mayor de la Segunda Zona Naval, Capitán de Navío Renato Navarro, y el Suboficial Mayor Domingo Bustos, hicieron entrega de la Insignia de Mando al Contraalmirante Purcell.

Al despedirse de todos los presentes rememoró los momentos vividos el 23 de noviembre de 2010, cuando asumió el mando de la Segunda Zona Naval, la que se encontraba enfrentando el mayor proceso de reconstrucción desde su creación, luego de ser devastada por el terremoto y tsunami del 27 de febrero de 2010.

"Al asumir este puesto, el más fuerte de mis sentimientos fue el de humildad ante la magnitud de la tarea que la Armada me encomendaba, una dosis de nerviosismo ante el desafío que debía enfrentar y la gran cantidad de variables a manejar. Pero a poco andar en mi gestión confirmé que la esencia del problema se reducía a lo que siempre ha sido el desafío de la profesión de Oficial de Marina: liderar equipos de trabajo, lo que en si mismo era un desafío por lo multifacéticos e interdisciplinarios que ellos son. A esto se sumaba el hecho que la Base Naval Talcahuano estaba literalmente en el suelo, con muchas soluciones aún en condición de transitorias y muchos proyectos aún en etapa de elaboración. Sin embargo, el mayor reto era reconstruir el alma de las dotaciones para comenzar a abordar los desafíos del futuro".

 

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El Contraalmirante Purcell dedicó parte importante de su discurso para agradecer a sus superiores, a la fuerza efectiva que estuvo bajo su mando, a las autoridades y vecinos con quienes le tocó trabajar y a su familia.

Su trabajo en la Segunda Zona Naval estuvo marcado por las labores que le tocó desarrollar para superar los efectos dejados por la emergencia. Primero al frente de la Fuerza de Tarea Naval Bío Bío, encargada de limpiar y reactivar la comuna de Talcahuano, lo que fue públicamente reconocido por las autoridades municipales y la ciudadanía chorera. Y estos dos últimos años llevando a cabo el proceso de reconstrucción del puerto militar.

El Contraalmirante Purcell dedicó parte importante de su discurso a agradecer a sus superiores, a la fuerza efectiva que estuvo bajo su mando, a las autoridades y vecinos con quienes le tocó trabajar y a su familia, que lo acompañó en su último día de servicio naval. "Al arriar mi Insignia de Mando sólo me queda agradecer, de todo corazón a cada uno de ustedes por la cooperación que me entregaron, por el apoyo que me brindaron, por la sana camaradería, las sonrisas con que nos saludamos cada día y por la paciencia que me tuvieron. Pero por sobre todo, gracias por creer y confiar en mí".

Luego, el Jefe del Estado Mayor de la Segunda Zona Naval, Capitán de Navío Renato Navarro, acompañado del Suboficial Mayor Domingo Bustos, hizo entrega de la Insignia de Mando al Contraalmirante Purcell, finalizando la ceremonia con el desfile de honor.

 

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La ceremonia de cambio de mando de la Comandancia en Jefe de la Segunda Zona Naval finalizó con el desfile de honor por parte del destacamento de presentación de la Escuela de Grumetes "Alejandro Navarrete Cisterna" y la Unidad de Infantería de Marina.

Mando de la Segunda Zona Naval
El nuevo Comandante en Jefe de la Segunda Zona Naval, Contraalmirante Osvaldo Schwarzenberg Ashton, es especialista en Submarinos, Oficial de Estado Mayor, Ingeniero en Armas con mención en Submarinos y Licenciado en Ciencias Navales y Marítimas. Es graduado de la Academia de Guerra Naval y durante su carrera ha estado embarcado más de 16 años en diferentes unidades de combate y de apoyo, incluyendo el Buque Escuela "Esmeralda", Transporte "Aquiles", Submarinos "Hyatt", "Simpson", "O'Brien" y "Thomson". Junto a lo anterior, se ha desempeñado como Comandante del Patrullero de Servicio General "Aspirante Morel", del submarino "Thomson" y del Buque Escuela "Esmeralda".

Durante sus destinaciones en tierra se ha desempeñado como Oficial de División en la Escuela Naval, Comandante de la Base de Submarinos, Jefe del Subcentro de Entrenamiento de Talcahuano, Jefe del Departamento Gente de Mar de la Dirección General del Personal de la Armada, Director de la Escuela Naval "Arturo Prat" y Director de Recursos Humanos de la Armada.

El Contraalmirante Purcell también tuvo palabras para él, a quien le deseó el mejor de los éxitos expresando que "le hago entrega de un equipo humano de excelencia, afiatado en la altísima exigencia profesional que esta Zona Naval impone. Es un grupo humano con objetivos claros, con doctrina, con sentido de propósito y de pertenencia. La Segunda Zona Naval está conformada por dotaciones de alto rendimiento, motivadas, entrenadas, con el alma sana, con gente llena de entusiasmo y lista para cumplir con las más altas exigencias que nuestro deber demanda".