A bordo del “Aquiles” se realizó el censo de aves marinas del territorio insular

Miércoles 20 de septiembre de 2017

Tres investigadores acompañan a la dotación del Transporte AP-41 “Aquiles” de la Armada de Chile durante su comisión destinada a apoyar a las islas Robinson Crusoe, Salas y Gómez, Pascua y San Félix. Pese a que cada proyecto es ejecutado por distintos organismos, los esfuerzos confluyen en desarrollar un censo de las aves marinas que se encuentran dispersas por nuestro territorio insular.

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Tres son los investigadores que acompañan en esta comisión a la dotación del buque

Una de las investigaciones que se está llevando a cabo corresponde a un estudio de la Universidad Católica del Norte y el Núcleo Milenio de Ecología y Manejo Sustentable de Islas Oceánicas (ESMOI), que busca recolectar información sobre los patrones de distribución y abundancia de aves pelágicas (marinas). En esta comisión, el biólogo marino Diego Valverde, es el encargado de recolectar los datos mediante la observación para generar un censo sobre estas especies.

Valverde señaló que otro de los objetivos al que apunta el estudio, es cuantificar los desechos que se encuentran flotando en el océano, los que han sido monitoreados durante su navegación en el “Aquiles”.

Sobre este fenómeno, el biólogo explicó que “las basuras flotantes son acumuladas paulatinamente tanto en Isla de Pascua como en Salas y Gómez, producto de la acción de las corrientes marinas que se desplazan de manera circular por el Pacífico Sur, y que forman en cercanías de ambas islas, un gran giro que mueve estos desechos hacia su centro. Esta situación tiene una relación directa en las aves, debido a que el plástico que se va fragmentado en pequeños trozos -denominados microplásticos- ingresa a la cadena alimenticia de los organismos”.

El segundo proyecto que se está realizando es de apoyo a “Ma'u Henua”, comunidad indígena que a contar del año pasado administra el 42 por ciento de la superficie del Parque Nacional Rapa Nui. Sergio Manuheuroroa, consejero y director de esta comunidad, señaló que su trabajo se orienta en generar un nexo entre patrimonio y las aves.

Para comprender del tema relató que en su cultura “las aves eran consideradas seres sagrados en las ceremonias, como por ejemplo en el Tangata Manu -que significa hombre pájaro- y que se celebró por última vez en el año 1866. Nuestra cultura, que conserva hasta hoy la tradición oral, cree que nuestros antepasados, al provenir directamente de los dioses, tenían la capacidad de transformarse en aves y en otros animales como signo de sabiduría. Es por esto que en la actualidad vemos como personas de nuestro pueblo, al igual que la toponimia de la isla, mantienen sus nombres que provienen de diversas especies de aves.”

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En el 2016, los resultados arrojaron que hubo un aumento en la población de aves en relación a años anteriores

Manuheuroroa aprovechó la instancia para agradecerle a la Armada de Chile, la oportunidad de realizar por primera vez, como comunidad indígena, el censo de aves pelágicas de Rapa Nui e islas aledañas, cuya finalidad es crear una base de datos sobre la avifauna, bajo el contexto de la conservación del medioambiente y del patrimonio étnico.

Uno de los protocolos para desarrollar labores de monitoreo científico durante las navegaciones y en terreno, exige la participación de personal del Servicio Agrícola Ganadero (SAG) para evitar el traslado de productos de origen vegetal como animal, que puedan atentar contra el patrimonio fito y zoosanitario de Chile.

Por ello, el encargado de Recursos Naturales Renovables del SAG de la Oficina sectorial de Rapa Nui, Edgardo Quezada, se embarcó en el “Aquiles” para cumplir con lo establecido y compartir la experiencia de haber sido parte del primer censo de aves pelágicas, ejecutado en el 2013 entre el SAG y Conaf.

“En estos cuatro años de análisis se puede destacar como hito el avistamiento del gaviotín albo, (kia kia en Rapa Nui), registrado en agosto 2016 en Salas y Gómez, cuando tuve el privilegio de observar en terreno dos parejas de adultos junto a dos nidos con huevos. Esta especie tiene la particularidad de ser poco conocida, por su lugar de nidificación, habiendo sido avistada por última vez durante la década de los sesenta”, comentó.

Otro de los resultados arrojó que, en el 2016, hubo un aumento en la población de aves en relación a años anteriores, fenómeno que podría estar conectado a un incremento de alimentos y a las condiciones climáticas, debido a que el registro fue obtenido a fines de la época invernal. Respecto a la mortalidad de las especies, se observó que el 80% contenía en su interior restos de microplásticos.

Finalmente en representación del Servicio Agrícola y Ganadero de la Oficina sectorial de Rapa Nui, Edgardo Quezada, manifestó su agradecimiento a la Armada de Chile y a la dotación del Transporte AP-41 “Aquiles”. “Durante cuatro años este buque nos ha brindado de manera ininterrumpida y eficiente su apoyo para efectuar nuestra importante misión, orientada a la protección de los recursos naturales en este lugar considerado como un santuario de la naturaleza”, puntualizó.